El Gobierno potenciará el turismo internacional de salud dentro de la Marca España

España recibe cada año entre 20.000 y 50.000 turistas sanitarios

Publicado el por Somos Pacientes

Cada año, entre 20.000 y 50.000 turistas visitan nuestro país por motivos médicos. Se trata del denominado ‘turismo sanitario o de salud’, que según los datos de Turespaña generó en 2012, año en el que la cifra de turistas sanitarios fue de 21.868, una inversión de 12,1 millones de euros.

Sin embargo, España es todavía un país emergente dentro del turismo de salud –frente a naciones más consolidadas que reciben anualmente unos 100.000 turistas sanitarios–. Por ello, dado que “para el turismo es un nicho de futuro, el Gobierno creará una plataforma nacional bajo la Marca España para fomentar esta práctica”, ha anunciado Isabel Borrego, secretaria de Estado de Turismo del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.

No en vano, cerca de nueve millones de europeos viajan cada año a otros países para someterse a operaciones, tratamientos médicos o por otras razones vinculadas a la salud y el bienestar. “Y el turista que viaja por razones médicas gasta entre 6 y 10 veces más”, destaca Isabel Borrego.

Calidad y buen precio

Los turistas de salud que visitan cada año nuestro país son principalmente alemanes, holandeses, británicos y suecos. Se trata, por lo general, de personas de clase media-alta que escogen España por la calidad de los tratamientos –en su mayoría intervenciones estéticas o plásticas– y por su precio, inferior al de sus países de origen.

En segundo lugar se sitúan los turistas sanitarios procedentes de Rusia y de los países árabes, también en busca de tratamientos de belleza. Y en tercer lugar, los franceses e italianos, que vienen a nuestro país para someterse a tratamientos de fertilidad o de reproducción asistida.

Y en este contexto, tal y como destaca el informe ‘Turismo de salud en España’, los hasta nueve millones anuales de desplazamientos internacionales por motivos de salud crecerán un 90% para el año 2020. “Se trata de un nicho de futuro para el turismo y hay que dar una imagen de país competidor. Además, también ayudará a desestacionalizar la oferta”, concluye Isabel Borrego.