La hemofilia es un trastorno hemorrágico causado por el déficit de uno de los factores de coagulación de la sangre: déficit del factor VIII de coagulación (Hemofilia A, que comprende hasta un 80% del total de los casos de hemofilia) o déficit del factor IX de coagulación (Hemofilia B).

Se transmite con patrón recesivo ligado al cromosoma X y se caracteriza por la aparición de hemorragias subcutáneas e intramusculares, por las hemorragias en boca, encías, labios y lengua, y por la presencia de sangre en la orina (hematuria) y los derrames en el espacio comprendido entre las superficies articulares de los huesos (hemartros).