Por primera vez, la voz del colectivo celíaco ha llegado con fuerza al Parlamento Europeo, de la mano de la Asociación Celíacos de Cataluña, que ha comparecido ante la Comisión de Peticiones del Parlamento para denunciar la desprotección que sufren millones de personas con celiaquía en Europa. En su intervención, la entidad ha reclamado medidas concretas que garanticen la equidad en el diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad crónica, que afecta a entre un 1% y un 6% de la población, aunque más del 75% de los casos permanecen sin diagnosticar.

La petición presentada por la Asociación —la número 1468/2024— tiene una base sólida tanto científica como social. “Llevamos años denunciando la falta de equidad en España y en Europa. La atención sanitaria a las personas con celiaquía no puede depender del país en el que naciste ni de tu nivel de ingresos”, afirmó Esther Roger, gerente de la entidad, durante su intervención en Bruselas.

La iniciativa cuenta también con el respaldo de la Asociación de Sociedades de Celíacos de Europa (AOECS). Su secretaria general, Verónica Rubió, también participó en la comparecencia para plasmar la “invisibilidad institucional” de esta enfermedad autoinmune crónica que, sin tratamiento adecuado, puede derivar en complicaciones graves como infertilidad, osteoporosis o linfomas.

Desigualdades que vulneran derechos

La Asociación ha subrayado que la actual falta de una política europea unificada sobre la celiaquía vulnera varios artículos clave de la legislación comunitaria. En concreto, el artículo 21 de la Carta de Derechos Fundamentales de la UE, que prohíbe la discriminación por motivos de salud, y el artículo 35, que garantiza el derecho a la prevención y atención sanitaria. También se contradice el artículo 168 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, que exige un alto nivel de protección de la salud en todas las políticas de la UE.

En países como España, la dieta sin gluten —único tratamiento eficaz para esta enfermedad— no está reconocida como prestación sanitaria, lo que obliga a los pacientes a asumir un sobrecoste anual estimado en 1.000 euros. Esta barrera económica lleva a que muchas personas no puedan seguir adecuadamente su tratamiento. Un estudio de la Universidad de Columbia (2019) reveló que uno de cada tres pacientes celíacos abandona la dieta sin gluten por motivos económicos.

Siete propuestas para una Europa más justa

Durante su comparecencia, la Asociación Celíacos de Cataluña presentó una batería de propuestas destinadas a garantizar un abordaje homogéneo y justo de la celiaquía en todos los Estados miembros:

Asociación Personas con Celiaquía de Cataluña en el Parlamento Europeo
  • Aprobación de una Directiva Marco Europea con protocolos de diagnóstico comunes y obligatorios.
  • Reconocimiento de la dieta sin gluten como tratamiento médico con ayudas económicas armonizadas.
  • Creación de un Observatorio Europeo que supervise la normativa y promueva políticas eficaces.
  • Impulso de medidas fiscales para abaratar los productos sin gluten.
  • Formación obligatoria para personal sanitario y de restauración colectiva.
  • Establecimiento de indicadores comunes de seguimiento y evaluación periódica.
  • Garantía de acceso seguro a alimentos sin gluten en espacios públicos y colectivos.

Estas medidas buscan corregir un escenario en el que las diferencias normativas y de acceso a recursos provocan situaciones de desprotección sanitaria que afectan a millones de europeos.

La Asociación Celíacos de Cataluña ha querido dejar claro, además, que su iniciativa nace desde la sociedad civil, sin vinculación política, y ha hecho un llamamiento a la ciudadanía europea para sumarse a la petición, disponible en la plataforma oficial del Parlamento Europeo. “La salud no puede ser un privilegio. La igualdad de acceso al diagnóstico y tratamiento de la celiaquía debe ser un derecho real para todas las personas, vivan donde vivan”, concluyó Roger.