El deterioro es similar al de población 10 años mayor que nunca ha fumado

El consumo de tabaco acelera la degeneración del cerebro masculino a partir de los 45 años

Publicado el por Somos Pacientes

El cerebro de los hombres que fuman se deteriora de forma más rápida, una progresión que comienza a partir de la edad de 45 años. Conforme concluye un estudio publicado en la revista ‘Archives of General Psychiatry’, los fumadores de 50 años muestran un deterioro cognitivo similar a las personas de 60 años que nunca han fumado. Una situación, sin embargo, que no se observó en las mujeres.

Además, los fumadores que abandonan el tabaquismo hasta 10 años antes también tienen un riesgo incrementado de deterioro cognitivo, especialmente en la función ejecutiva, aquella que involucra varios procesos conjuntos para la concreción de una meta particular.

Perjuicios múltiples

Sin embargo, los fumadores que habían abandonado el hábito hacía décadas no presentaron deterioro acelerado de sus funciones cerebrales o capacidades cognitivas.

En palabras de la Dra. Severine Sabia, del University College de Londres (Reino Unido) e investigadora principal del estudio, “sabíamos que el tabaquismo es un factor de riesgo de enfermedad respiratoria, cáncer y enfermedades cardiovasculares. Ahora, este estudio muestra que también tiene un efecto perjudicial sobre el envejecimiento cognitivo, envejecimiento que se hace evidente ya a la edad de 45 años”.

Mayor consumo en varones

Los investigadores observaron a 5.099 hombres y a 2.137 mujeres de Reino Unido en un primer momento, cuando la media de edad de los participantes era de 56 años, para posteriormente valorar progresivamente su estado durante 25 años. La conclusión principal es que “un hombre fumador de 50 años muestra un deterioro cognitivo similar al de un hombre de 60 que nunca fumó”, explica la Dra. Severine.

Curiosamente, la relación entre tabaco y deterioro cognitivo no se observó en mujeres. Los autores reconocen que necesitan profundizar en su investigación, si bien sospechan que la ausencia de este perjuicio en las mujeres puede explicarse a que los hombres consumen más tabaco o a que la muestra de participantes en el estudio se componía básicamente de varones.

– ¿Quieres consultar el estudio publicado en la revista ‘Archives of General Psychiatry’?