Este jueves, 17 de noviembre, se celebra la quinta edición del Día Mundial de la Prematuridad, una efeméride instituida por la Fundación Europea para el Cuidado de los Recién Nacidos (EFCNI), la National Premmie Foundation de Australia y las organizaciones estadounidenses Little Big Souls y March of Dimes con el objetivo de informar y concienciar a la población sobre los problemas asociados a los partos prematuros, primera causa global de deceso durante los primeros meses de vida.

Como explica la National Premmie Foundation, “cada año nacen en todo el mundo en torno a 15 millones de bebés de forma prematura. En este Día Mundial queremos que todas las personas honren a los 15 millones de neonatos que en este 2016 lucharán por sobrevivir y a los más de un millón de bebés que desgraciadamente pierden esta lucha por la vida. La tasa de nacimientos prematuros está aumentando, pero la población general sabe muy poco acerca de su prevención y de los problemas y riesgos que afrontan los niños prematuros en su desarrollo”.

Y en este contexto, como recuerda la EFCNI, “cada año nacen en Europa en torno a 500.000 bebés de forma prematura. Y dado que no existen en el continente unos estándares comunes de atención para estos neonatos, la tasa de supervivencia varía no ya solo entre los países, sino incluso entre los propios hospitales”.

La presente edición de la efeméride girará, un año más, en torno a la campaña ‘Calcetines para la Vida’ –‘Socks for Life’–, iniciativa global puesta en marcha por la EFCNI para incrementar la concienciación sobre los nacimientos prematuros y, a través del trabajo en equipo, mejorar la situación de estos neonatos y de sus familias.

Niños prematuros

Los neonatos prematuros presentan, en comparación con los nacidos a término, mayor riesgo de problemas de salud. El resultado es que la cifra de bebés que fallecen a consecuencia de un parto prematuro es superior a la de aquellos que lo hace por enfermedades mejor conocidas, caso de la malaria o del VIH/sida. De hecho, cada año fallecen 1,1 millones de bebés por haber nacido de forma prematura. Todo ello a pesar de que, cuando menos, el 75% de estos decesos pueden prevenirse

En consecuencia, la atención sociosanitaria y educativa de estos niños resulta fundamental no solo en los primeros meses de vida, sino durante sus primeros años.

Concretamente, los niños prematuros se clasifican en extremadamente prematuros –cuando el alumbramiento se produce antes de la semana 28 de gestación–; grandes prematuros –cuando se produce entre las semanas 28 y 32–; y prematuros tardíos –cuando el nacimiento tiene lugar entre las semanas 29 y 36–. Y en función del grado de prematuridad, mayor es el riesgo de complicaciones graves como la parálisis cerebral, los déficits sensoriales, las enfermedades crónicas y las infecciones respiratorias agudas –especialmente la bronquiolitis causada por el virus respiratorio sincitial (VRS).

En este contexto, cada año nacen en nuestro país cerca de 31.000 bebés de forma prematura –esto es, antes de alcanzar la semana 37 de gestación–. Así lo muestran los datos del ‘Informe Euro-Peristat’, en el que se constata que 1 de cada 13 bebés nacidos en España lo hace de manera prematura.

‘El lado positivo de la batalla’

La Asociación de Padres de Niños Prematuros (APREM), miembro de Somos Pacientes, ha puesto en marcha la campaña ‘El lado positivo de la batalla’, a través de la cual las madres y padres de los niños prematuros podrán compartir en el perfil de Facebook de la Asociación sus fotografías y testimonios sobre los primeros días, semanas y meses de vida y lucha por la supervivencia de sus hijos.

Para participar en la iniciativa, envía tus fotografías y testimonios a la dirección de correo electrónico apremprematuros@gmail.com.

Por su parte, la Federación Nacional de Asociaciones de Prematuros (FNAP) celebró el pasado 5 de noviembre en Dos Hermanas (Sevilla) sus ‘I Jornadas FNAP por el Día Mundial del Prematuro’.