Si bien las personas con una ostomía pueden disfrutar de una vida prácticamente normal gracias, en gran parte, al asesoramiento y cuidado por parte de sus enfermeras estomaterapeutas, muchos de los más de 70.000 pacientes tienen acceso limitado o incluso nulo a estas profesionales. El Consejo General de Enfermería (CGE) pone en marcha la campaña ‘Cada ostomía una historia’ para visibilizar su realidad, romper con el «estigma de la bolsa» y llegar a aquellos pacientes que no se atreven a consultar sobre su situación.

Florentino Pérez Raya, presidente de CGE, recuerda que “los pacientes pueden llevar una vida normal, pero para ello es esencial que se apueste por las consultas de enfermeras estomaterapeutas, todavía insuficientes en nuestro país y con diferencias entre territorios. Ahí radica la diferencia entre una buena o una mala calidad de vida del paciente con todo lo que ello comporta”.

La campaña está protagonizada por Raquel Revuelta, presentadora que ha mantenido distintas reuniones con pacientes para conocer su realidad, y por Mikel Urmeneta, creador de la marca ‘Kukuxumusu’ y actual director creativo de ‘Katuki Saguyaki’, que ha diseñado su imagen.

Como explica Revuelta, “tras el primer encuentro con los pacientes me di cuenta de que cada uno de ellos tenía una historia muy diferente que contar y todas ellas eran conmovedoras y con mucha fuerza. Precisamente esa era la fuerza que sabía íbamos a necesitar si queríamos plasmarlo en un dibujo que, al mismo tiempo, debía transmitir vitalidad y optimismo”.

Vida normal

Por su parte, indica Urmeneta, “al principio apenas sabía nada de lo que era una ostomía. Poco a poco, y tras lo que me había contado Raquel, seguí investigando y me di cuenta de que era una situación que podía pasarle a cualquiera en cualquier momento. Lo que más me llamó la atención es que las personas ostomizadas pueden hacer una vida normal, es decir, que al poco tiempo de la intervención pueden salir a correr, ir a la playa, comer prácticamente de todo, etc. En fin, hacer una vida como la que yo hago”.

La imagen de la campaña, desarrollada con la colaboración de la empresa Coloplast, muestra al paciente y a las personas de su entorno convertidos en pájaros que vuelan sobre un cielo azul hacia el sol. Un gesto de libertad en el que, apunta Urmeneta, “no podía faltar la enfermera que acompaña al paciente durante todo el proceso”. Y en dirección contraria, un buitre atraviesa el cielo para reflejar el primer momento de miedo que viven los pacientes y todos los obstáculos que se encuentran.

La imagen, presentada en el Congreso de Enfermería Experta en Ostomías, ha sido plasmada en una camiseta que el presidente del CGE anima a toda la población, famosa o anónima, “a llevar con orgullo porque con ello estará contribuyendo de forma muy positiva a que los pacientes dejen de sentirse aislados”.