El Congreso de los Diputados ha acogido el acto institucional Cáncer, cuestión de Estado: la sentencia, impulsado por el Grupo Español de Pacientes con Cáncer (GEPAC), en el que se escenificó simbólicamente un juicio ciudadano a la atención oncológica en España. La iniciativa, centrada en visibilizar las carencias estructurales del sistema, reunió a pacientes, expertos clínicos, juristas, representantes parlamentarios y sociedades científicas, culminando con la lectura de un veredicto que exige reformas urgentes y equitativas.
Durante el evento, celebrado en la Sala Ernest Lluch del Congreso, se emitió una sentencia simbólica en la que se denunciaron las desigualdades territoriales, los retrasos diagnósticos, la escasa integración de la atención psicooncológica y la falta de inversión en investigación e innovación. El fallo fue presentado por el Dr. Martín Sellés Fort, presidente del jurado popular, y leído por la Magistrada María Paz Fernández-Rivera González, en un formato que emuló un proceso judicial y que otorgó protagonismo a los testimonios de los pacientes como pieza clave de la jornada.
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Las medidas recogidas en esta sentencia incluyen garantizar la equidad en el acceso a tratamientos, reforzar la prevención y el cribado, integrar la psicooncología en el Sistema Nacional de Salud, impulsar la medicina personalizada y el uso de inteligencia artificial, y reconocer formalmente a las organizaciones de pacientes como interlocutores legítimos del sistema sanitario.
Parlamentarios frente al cáncer
En el marco del acto también se presentó oficialmente el grupo Parlamentarios frente al Cáncer, concebido como un espacio de trabajo transversal entre fuerzas políticas. La mesa de diálogo político, moderada por la presidenta de GEPAC, Begoña Barragán, contó con la participación de Carmen Andrés (PSOE), Elvira Velasco (PP) y Agustín Santos Maraver, presidente de la Comisión de Sanidad del Congreso. Todos coincidieron en la necesidad de convertir la atención al cáncer en una prioridad política sostenida, más allá del ciclo legislativo.
Por otra parte, uno de los momentos más significativos de la jornada fue la presentación del manifiesto ciudadano El cáncer no es cuestión de precio, es cuestión de Estado, promovido por GEPAC. Este documento recoge las reivindicaciones centrales del colectivo de pacientes oncológicos y propone una hoja de ruta para garantizar un sistema más justo y eficaz.
Entre las demandas del manifiesto figuran la eliminación de las demoras y barreras territoriales en el acceso a diagnósticos y tratamientos, el refuerzo del papel de las organizaciones de pacientes en los órganos de decisión y el establecimiento de una estrategia estatal contra las desigualdades en la atención oncológica.
Este texto servirá de base para una campaña de recogida de firmas que ya está en marcha en la web de GEPAC y que busca movilizar a la ciudadanía para impulsar reformas concretas y urgentes. “No se trata solo de medicamentos, sino de dignidad, de equidad y de vida”, afirmó Barragán al concluir su intervención.
El manifiesto
El manifiesto plantea una crítica directa a la lógica económica que, según denuncian desde GEPAC, está condicionando el acceso a tratamientos oncológicos. Ante esta situación, los pacientes exigen libertad de prescripción y acceso a terapias seguras, eficaces y personalizadas, sin interferencias externas ni demoras injustificadas. Se trata de una llamada de atención a toda la sociedad para defender la ética médica y los derechos fundamentales de las personas con cáncer.
“Cuando quien cuida impone límites por razones financieras, la salud y la vida del paciente quedan en peligro”, afirma el documento, que reclama transparencia total en los procesos de autorización de tratamientos y un blindaje legal para garantizar que ninguna decisión clínica esté supeditada a intereses ajenos a la medicina.
GEPAC invita a pacientes, profesionales, asociaciones, medios e instituciones a firmar y difundir el texto, entendiendo que proteger hoy el derecho a una atención oncológica digna es también garantizarlo para las generaciones futuras. “El cáncer no admite recortes, ni excusas, ni silencios”, concluye el llamamiento.