Demanda del CERMI al Gobierno

Etiquetado en braille de los productos de consumo masivo

Publicado el por Somos Pacientes

El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), miembro de Somos Pacientes, reclama al Gobierno que promueva la regulación del etiquetado en braille de los productos de consumo masivo como medio de protección de los derechos de los consumidores con discapacidad visual que conocen y emplean este sistema de lectoescritura.

Como explica el CERMI, “exigimos Ejecutivo la aprobación de una disposición normativa de ámbito estatal que regule esta materia, determinando qué productos y en qué forma han de contar con etiquetado en braille, así como con otros formatos complementarios que permitan a las personas con discapacidad visual el acceso a la información a través de distintas tecnologías de uso generalizado”.

No solo en medicamentos

A día de hoy, nuestro país carece de una normativa sobre etiquetado en braille de productos de consumo, lo que debilita enormemente la protección de las personas con discapacidad visual como consumidores y usuarios.

De hecho, esta protección solo se contempla en el ámbito de los medicamentos, cuyos envases han de contener determinada información básica rotulada en braille por imperativo de la Unión Europea. No así en el resto de productos, en los que no existe tal obligación y la decisión queda en manos de los fabricantes y operadores económicos, que apenas prestan atención a esta demanda social.

Sin embargo, la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas concede al braille reconocimiento y protección máximas como parte esencial de la comunicación, como elemento de accesibilidad, como contenido integrante de la libertad de expresión y opinión y de acceso a la información, y como materia educativa que ha de formar parte del aprendizaje y el currículo de las enseñanzas.

– A día de hoy, 98 asociaciones de pacientes dedicadas a la discapacidad y a la dependencia ya son miembros de Somos Pacientes. ¿Y la tuya?